Edificio

La casa hermandad de la Real Hermandad de Nuestro Padre Jesús del Santo Sepulcro y Nuestra Señora de la Soledad, fue inaugurada el día 1 de diciembre de 2002, siendo Hermano Mayor D. Manuel Mérida-Nicolích Rubio.
La finalidad del proyecto fue definir las instalaciones necesarias para la realización de un museo donde exponer al público el amplio patrimonio que esta hermandad posee (tronos, bordados, orfebrerías, pinturas, y demás elementos patrimoniales).
El edificio debía contar con las instalaciones administrativas, sociales y culturales necesarias para el normal funcionamiento de la hermandad a lo largo del año e intentar que los distintos usos del edificio fuesen independientes.
Durante muchos años, se acarició la idea, como otras tantas cofradías y hermandades, de poseer una casa hermandad que evitase los problemas que conlleva ubicar los tronos en tinglados, por lo que el pensamiento de crear la casa surge hacia el año 1977. Tales hechos quedaron en una ilusión colectiva debido a las dificultades que suponía la adquisición de un terreno adecuado y la construcción del edificio. A pesar de ello, ninguna de las directivas que desde esa época han regido los destinos de la hermandad rechazó la idea. De hecho, a medida que el tiempo pasaba, la necesidad se incrementaba.
Tras varios años de ilusiones, entre 1994 y 1995 se inician las conversaciones con el Ayuntamiento, con el fin de negociar la compra del solar de Calle Alcazabilla junto con la cofradía de Estudiantes. Los 606,55 metros cuadrados del solar permitían la construcción de ambas casas, por lo que de esta forma se inicia un largo proceso administrativo y técnico para llevar a cabo el proyecto.
En 1996 se firma la escritura y en 1998 se aprueba el proyecto de ejecución y se concede la licencia de obra, que es expedida por el Excelentísimo Ayuntamiento en enero de 1999. A partir de esta fecha comienza un periodo en el que se construye el edificio, salvando importantes obstáculos de índole urbanístico y administrativo, que dura algo más de tres años y finaliza oficialmente el día 1 de diciembre de 2002 con la inauguración de la casa hermandad.
El solar donde se levanta la casa hermandad posee 303,05 m2, tiene fachada a calle Marquesa de Moya y a calle Alcazabilla, y linda por su medianería izquierda con la casa hermandad de la Cofradía de Estudiantes.

Evangelistas en el Portón de Tronos

El edificio consta de una planta sótano, donde se ubican los columbarios, almacén y aseos.
Una planta baja, donde se sitúa en el centro el vestíbulo de entrada, a la izquierda el salón de tronos y a la derecha una sala de exposición del museo con parte de los elementos patrimoniales de todo tipo.
Una primera planta, que consta básicamente de un mirador al salón de tronos y una segunda sala de museo donde actualmente se expone la pinacoteca.
La segunda planta, en la que se encuentra la dirección y gestión de la hermandad, despacho del Hermano Mayor, sala de comisiones, secretaría, tesorería, archivo, albacería, taller, aseos y pequeño patio.
La tercera planta posee dos grandes salones, donde se desarrolla el área socio-cultural para celebración de Juntas de Gobierno, cabildos, exposiciones, conferencias, conciertos y actos varios.
Por último, la planta ático, destinada a salón social, con una privilegiada terraza desde donde se puede contemplar la Alcazaba, el Teatro Romano y el Palacio de la Aduana.

Entorno

Finalmente, cabe  destacar a los arquitectos artífices de este edificio como son  José María García Jurado, José María Andérica, Emilio Betés Cuadras, Miguel Ángel Ruiz Barrionuevo y Miguel Ángel Algarra Bueno, como director de obras.